Ana Clara Gonzalez ing agr del INTA Anguil
especialista en Bienestar Animal
Consideraciones y recomendaciones a tener en cuenta en la
elección y manipulación de las vacas para la Prueba de
Capacidad de Servicio (PCS)
1) Peso y edad: las hembras deberían pesar, aproximadamente, un
70 % del peso de los toros a evaluar, y tener entre 3 y 7 años de
edad.
2) Docilidad: en el momento de la colocación del bozal, con la vaca
sujetada en el cepo, observar el comportamiento y descartar
para su uso en la prueba aquellas que se manifiesten muy
nerviosas y/o ariscas, salvo que la disponibilidad de hembras
sea baja.
3) Momento del ciclo estral: según las investigaciones doctorales
de Blockey (1975), no es necesario utilizar hembras en celo,
debido a que el brete restringe sus movimientos, siendo
suficiente estímulo sexual para el toro. A su vez, en un estudio
llevado a cabo por Geary y col. (1991), los toros evaluados no
mostraron preferencia por las hembras en celo.
4) Lubricación: a cada hembra se le debe colocar un lubricante con
antiséptico ya que, de no encontrarse en celo, su vagina estará
seca y la fricción puede conducir a alguna lesión vaginal y/o
peneana. Es conveniente volver a lubricar las vacas durante la
prueba.
5) Hembras mochas: la presencia de cuernos dificulta la colocación
de la vaca en el brete y representa un factor de riesgo para las
personas involucradas en esta maniobra. Al brete se la lleva
desde la manga, con un bozal y una soga de 50 metros, con la
asistencia de un tractor o un caballo.
6) Proporción de vacas y toros adultos: por cada 30 toros adultos a
evaluar se debe contar con 6 vacas embretadas. Esto significa
que cada vaca recibirá 5 servicios, si los toros los distribuyen en
forma equitativa. Los toros se van retirando del corral de monta
una vez que hayan servido.
7) Proporción de vacas y toritos vírgenes: será la misma que para
toros adultos, ya que se pretende que sirvan 2 veces a la vaca
para ser retirados del corral. Cada vaca recibiría 10 servicios,
aunque con animales más livianos, pues un torito pesa 150-200
Kg menos que un toro adulto, por lo que en el momento de la
estocada el peso que le transfiere a la hembra es mucho menor.
8) Rotación: cuando la cantidad de toros a evaluar supere los 30,
deberán rotarse las vacas de los bretes. Se debe contar con un
mínimo de 10 vacas “de reserva”, a ser empleadas en las
rotaciones y para cuando, eventualmente, sea necesario realizar
algún reemplazo.
9) Priorizar el bienestar. Cualquier vaca que, durante la prueba, se
observe con manifestaciones comportamentales de disconfort,
no receptiva a la monta, con sangrado leve por la vulva o con
excesivos intentos de salir del brete, debe ser liberada en forma
inmediata y reemplazada. Es conveniente aplicarle una dosis de
antibiótico y ubicarla en una ensenada con acceso a agua y
disponibilidad de sombra. Cabe señalar que, en Australia,
Blockey (1978) comparó vacas en matadero provenientes del
servicio natural versus vacas procedentes de una PCS y solo
detectó un leve enrojecimiento vaginal en estas últimas.
10) Duración. En sus inicios la PCS duraba 40 minutos (1975 –
1987), luego 20 minutos (1988 – 1992), y posteriormente 10
minutos (1993 – 2007). Desde 2008 a la actualidad,
independientemente del tiempo, se determina 1 servicio en toros
adultos y 2 servicios en toros vírgenes. El acortamiento de la
duración de la prueba ha permitido lograr un mayor nivel de
bienestar animal en las vacas, así como un mejor
aprovechamiento del tiempo y una mayor dinámica de trabajo.